En diciembre pasado, la Comisión Europea puso en marcha el Erasmus +, el programa marco de fondos europeos para el período 2014-2020 en el ámbito de la educación, la formación, la juventud y el deporte. Erasmus + cuenta con un presupuesto de 14.770 millones de euros, y es una fuente vital de apoyo financiero para muchos actores colectivos – por ejemplo, las organizaciones juveniles y las organizaciones no gubernamentales internacionales – que participen en la construcción europea a través de iniciativas en materia de educación, formación profesional y movilidad estudiantil. El Programa Erasmus+, por lo tanto, está en principio abierto a todos. Sin embargo, la Comisión Europea ha decidido hacerlo accesible a unos pocos, ya que ha editado las directrices (más de 200 páginas) y los documentos necesarios para el registro únicamente en inglés. La traducción al resto de lenguas oficiales de la Unión se ha programado para un momento posterior, no antes de abril de 2014, a pesar de que los primeros plazos para presentar las solicitudes de proyectos comienzan en a mediados de marzo del 2014. La Asociación Nitobe denuncia esta injustificada discriminación lingüística, que tiene el efecto de distorsionar la competencia en el acceso a los fondos de la UE, dando una ventaja injusta a las organizaciones e individuos de habla inglesa, y en particular a las procedentes de Irlanda y el Reino Unido. Simplemente no es posible para los ciudadanos que no hablan inglés con fluidez el poder participar en un proyecto que está financiado por el presupuesto de la UE, es decir, con los impuestos de todos los ciudadanos europeos. Esta situación no es aceptable en absoluto. La Comisión debe garantizar la rápida publicación de las traducciones de los documentos y posponer las fechas de vencimiento de las convocatorias, para permitir que todos participen por igual en Erasmus +.